Ca punchaupi yayachcani yanasuyta Don Sixto Palavecino, chaymi sutinmi can, inacuwan 1997 wata casckanta sapa punchau rejcarani wasinman Tala Pozopi Santiago Llajtapi. Tutamantaspi chayajcarani na paycka yayaspa na tiajcara, yuyani imallatapas upias mate, té café, imata callarejcaraiku llamakayta quichua ckalluwan! Nocka tapojkarani Sixto imaynataj quichuata ancha munanqui? pay niajcara nockaychis sujinalla caychis sonckoyniychispi quichuata nuñus wiñarayku. Llajtajniychispa yachayninan.
Chaina tucuymanta rimas quichuallamanta cusicokarayku. Ckonckallamanta niajkara imata suyas tianqui ? guitarrayquita apiy nocka violinta uyarichisaj, acuychis sonckoychista cusichej. Huu juu juu juu y suj ckapariyta chutquichejkara,yayani.
Chayrayku ckallumama mana chincananpaj punchauninpi, paypa sutinpi y nockapatapas sutiypi ninimi, anajman quichuacka.
¡¡En este día estoy recordando a mi amigo Don Sixto Palavecino, de seguro es su nombre!! me parece que era el año 1997 cada día solía ir a su casa de Tala Pozo en la ciudad de Santiago. Por las mañanas solía llegar y el ya me estaba esperando, recuerdo tomando algo, mate, te, café algo así comenzábamos a trabajar con la lengua quichua. ¿Yo le preguntaba Sixto como es que amas tanto la quichua? El me solía decir nosotros somos como uno solo. En nuestros corazones mamando la quichua nos criamos. Con el saber de nuestro pueblo.
Así hablando de todo y solo de quichua nos alegrábamos. ¿De repente me decía que estas esperando? agarra tu guitarra, yo tocare mi violín vamos alegrar nuestros corazones. Huuj juu juu juuu y solía soltar un grito, recuerdo.
¡Por eso para que la lengua madre no se pierda, en su día! en el nombre de el y también en mi nombre digo! Arriba la Quichua.
Memorias de Vitu Barraza